Subvenciones

Espacio reservado para un posible aviso desta- cado de última hora.

Actualidad

Dénia acoge la presentación de la Escritora del Año 2024 de la AVL, Maria Ibars

La Acadèmia Valenciana de la Llengua ha presentado el programa de actividades previstas por la Comisión del Escritor del Año 2024, que este año se dedica a la escritora de Dénia Maria Ibars. El acto, presidido por la presidenta de la AVL, Verònica Cantó, y el alcalde del municipio, Vicent Grimalt, se ha celebrado en la sala de plenos del ayuntamiento de la capital de la Marina Alta. Grimalt ha abierto el turno de intervenciones con el agradecimiento a la AVL por dedicar el año 2024 a Maria Ibars y por el hecho de que la presentación se haya celebrado en Dénia. «Maria Ibars siempre ha estado muy presente en esta tierra que ella acarició con sus palabras, muchas de ellas escritas, como sabemos, a la sombra del Montgó y al borde del mar», ha indicado Grimalt. «Y merecía que esta admiración que Dénia le profesa se hiciera extensiva al resto de nuestra Comunidad; merecía el reconocimiento que este año recibirá gracias a la Acadèmia Valenciana de la Llengua», ha añadido. «A punto de empezar el mes de marzo, marcado por la celebración del Día de la Mujer, la puesta en valor de Maria Ibars como mujer escritora, y escritora comprometida con la igualdad, adquiere una relevancia especial. Atrevámonos, pues, a descubrir o redescubrir su obra, que es un homenaje permanente en nuestra ciudad», ha concluido el alcalde de Dénia.

Seguidamente, ha intervenido Àngels Gregori, presidenta de la Comisión de la Escritora del Año 2024, quien ha destacado que se trata de una autora «pionera», en tiempos difíciles desde el punto de vista lingüístico y social. «Ibars forma parte de una estirpe perdida, que podría ir desde Isabel de Villena a Isabel Clara-Simó, y que tenemos que reivindicar», ha indicado Gregori. En este sentido, ha asegurado que en numerosas ocasiones la musculatura de una literatura no siempre está en la cumbre, sino en los cimientos, como es el caso de la autora de Dénia. Asimismo, Gregori ha destacado que uno de los puntos singulares y a destacar de Ibars es su relación con su entorno. «Dénia la ha hecho suya y la ha hecho de todos sus ciudadanos», ha agradecido.

«Una mujer nada convencional»

También se ha expresado con emoción Patrícia Payà, bisnieta de la escritora homenajeada. «Nos encontramos a la sombra del Montgó un 29 de febrero. El año que la AVL le dedica tenía que ser fuera de lo común, como ella, una mujer nada convencional», ha dicho Payà. Patrícia ha mostrado la gratitud de la familia por el reconocimiento y ha confiado en que los actos servirán para conocer su trabajo y su valentía para romper estereotipos. «Maria Ibars es nuestra abuela y nuestra bisabuela, pero la gente de aquí la ha hecho suya y esto no pasa espontáneamente. Es un orgullo para sus descendentes y para su pueblo que sea homenajeada por la AVL», ha expresado.

La presidenta de la Acadèmia ha cerrado el turno de intervenciones agradeciendo al Ayuntamiento y al vecindario de Dénia la implicación en la celebración del Año Maria Ibars. «Se trata de crear sinergias, de tejer alianzas y de tender puentes, de sumar voluntades, porque uno de los objetivos de la Acadèmia al designar la Escritora del Año, es contribuir a la difusión a todos los niveles, la divulgación a todos los públicos y en todos los ámbitos de la autora elegida, en este caso Maria Ibars. Porque es necesario conocer y reconocer», ha expresado Cantó.

En este sentido, la presidenta de la AVL ha recordado que Maria Ibars es la escritora a quien la institución hace un reconocimiento. «Nuestras creadoras literarias son las figuras más escondidas, olvidadas y silenciadas, las que han sufrido más que nadie la criptoginia», ha subrayado para, seguidamente, reivindicar «rescatarlas del olvido y salvaguardar su legado, para que, como en el caso de Maria Ibars, se conviertan en referentes nuestros, y conformen nuestra genealogía femenina al lado y con la misma jerarquía de los escritores e intelectuales de todos los tiempos».

A la sombra del Montgó

Durante la presentación, se ha dado a conocer el logotipo que identificará el Año Maria Ibars. El punto de partida para la realización de la imagen ha sido el Montgó, la montaña que llenó su obra, como bien subraya la expresión que ella misma utilizó en su obra: A l’ombra del Montgó. «Generamos la síntesis de una montaña que habla de escritura y de escritora. Apenas unas líneas sutiles para definir las iniciales de Maria Ibars que se funden con las formaciones geológicas características del Montgó. Unas líneas que dibujan la ilusión de los libros que se resbalan de forma caprichosa en una estantería, hasta quedar el primero tumbado para formar el espigón de la montaña, que se adentra dentro del mar. El último de estos libros es la «i» inicial del apellido de Maria Ibars que acoge, a la vez, el simbolismo del faro», explica Germán Segura, del estudio Espirelius, responsable de la marca que acompañará la celebración.

Exposición, publicaciones y jornadas

Àngels Gregori ha explicado algunas de las propuestas con las que se difundirá y se valorará la obra de Maria Ibars. La primera de las actividades será la exposición itinerante «Maria Ibars: un paisaje de palabras. Escribir y vivir a la sombra del Montgó», formada por doce paneles, que recorrerá la Comunidad Valenciana a lo largo del 2024. Los comisarios de la exposición, Carles Mulet y Rosa Seser, son los responsables de esta muestra, y también de la exposición fija que se exhibirá durante el segundo semestre del año. La exposición se adentrará en la figura y la obra de la autora y mostrará elementos etnográficos relacionados con el mundo rural y tradicional de la Marina Alta, marco que conforma el contexto de sus novelas. Además, con motivo de la inauguración de la muestra, se celebrará un seminario dedicado a la obra de Maria Ibars. Mulet y Seser también son los elegidos por la Comisión para elaborar la guía didáctica pensada para los estudiantes de Bachillerato.

La exposición fija que se inaugurará en València a finales de año, y se trasladará después a Dénia, mostrará material inédito sobre la autora, cedido para la ocasión por su yerno, el pintor Enrique Pastor de Velasco. «Un material», ha explicado Rosa Seser, «que se encontraba en Penyamar, la casa dianense de Maria Ibars, pero al cual no habíamos tenido acceso nunca». Manuscritos y mecanoescritos originales, algunas fotografías de la escritora y dos retratos de Maria Ibars pintados por Pastor de Velasco son algunas de las joyas que se desvelaran al público. Recortes de la vida y obra «de una mujer pionera, como escritora y por el hecho de escribir en valenciano, de la cual sorprenden la fortaleza y la valentía», señala Seser.

En cuanto a las publicaciones, la AVL, conjuntamente con la Institución Alfonso el Magnánimo, coeditará la obra L’últim serf, con una clara dimensión divulgativa. Como en años anteriores, la edición será la protagonista de la actividad que harán los veinte clubes de lectura organizados por el Colegio Oficial de Bibliotecarios y Documentalistas de la Comunidad Valenciana, con el que también se llevarán a cabo otras actividades para difundir la obra de la autora. Además, está prevista la edición de una antología poética a cargo de las académicas Maria Àngels Francés i Àngels Gregori, especialmente a partir de la compilación Poemes de Penyamar, de 1949.

Entre las propuestas, presentadas justo el día del cumpleaños de Maria Ibars, destaca un acto en la Font de la Figuera, localidad donde ejerció su profesión de maestra durante muchos años, que coincidirá con la llegada al municipio de La Costera de la exposición itinerante.

La AVL también plantea la organización de encuentros y rutas literarias para recorrer el paisaje que fue inspiración y motor de la literatura ibarsiana, en colaboración con el Ajuntament de Dénia y otras entidades interesadas en conmemorar la figura de la autora, como por ejemplo, el Festival de las Humanidades de Dénia.

Un paisaje de palabras

Anna Maria Ibars i ibars nació el 29 de febrero del 1892 en València, donde entonces estaba la familia Ibars al servicio del exportador hortofrutícola Juan Arguimbau, de Dénia. Los Ibars pronto vuelven a Dénia, y junto a los almacenes de pasa transcurrió la niñez y primera juventud de Maria junto con su hermana Inés. El gran interés de Maria por el aprendizaje motivó el esfuerzo económico de los padres para que estudiara Magisterio en València. El año 1916, ya maestra en la Font de la Figuera, conoce Vicent Payà, un comerciante de vinos, con quien se casa. En los años siguientes nacerían su hija, Raquel, y su hijo, Vicente-Darío.

En otoño de 1934, Maria se traslada, con sus hijos, a trabajar a València. La llegada a la ciudad implicó su integración en el movimiento cultural valencianista, propiciada por el reencuentro con Carles Salvador, antiguo compañero de estudios. Sin embargo, la Guerra Civil interrumpe aquella incipiente proyección pública.

Acabada la guerra, en su estimada Dénia y en Les Rotes, junto al mar, Maria Ibars construye Penyamar, la casa que se convierte en su vivienda preferida, donde se gestaría buena parte de su obra. Paralelamente, la autora continúa su tarea literaria y cultural y, a cobijo de Lo Rat Penat, publica Poemes de Penyamar (1949), y participa con Ram a l’amiga en la VI Mesa de Poesía (1951) y en varias coronas literarias, certámenes vicentinos y publicaciones periódicas.

La muerte, en 1955, de Carles Salvador fue un golpe para la convulsa situación anímica de la autora, en un momento en que empeoraba la ya precaria salud. A finales de la década, pasará temporadas en Madrid, donde reside su hija Raquel. Aun así, Maria Ibars continúa en su empeño literario, ahora más cerca de Nicolau Primitiu. Es la etapa de la publicación, en Sicània, de la obra narrativa: Vides planes (1962), L’últim serf (1965) y el conjunto de cuentos (1961-1966); así como también de las colaboraciones en el semanario La Marina (1960-1964).

Después de esto, ya solo tenemos un corto silencio que conduce a su muerte, ocurrida el día 9 de enero del 1965.

La obra de Maria Ibars, escrita en un tiempo difícil, tuvo que afrontar importantes dificultades de divulgación y de valoración crítica. No obstante, por su valía inmanente y por su contribución al cultivo literario de nuestra lengua durante el franquismo, se puede considerar muy extraordinaria.

Otras noticias

imprimir